Pfizer anunció que está estudiando la posibilidad de aplicar una tercera dosis de su vacuna contra el COVID-19 como parte de una estrategia de protección contra versiones mutantes del coronavirus.
Las autoridades de salud dicen que las inyecciones de primera generación aún protegen contra las variantes que aparecen en distintas partes del mundo, pero los fabricantes empiezan a prepararse en caso de que aparezca una mutación resistente a las dosis.
Pfizer indicó que ofrecerá una tercera dosis a 144 voluntarios entre los que participaron en los primeros ensayos en Estados Unidos el año pasado.
Quiere determinar si una tercera dosis entre seis y 12 meses después de las dos primeras puede activar el sistema inmunitario para rechazar un virus mutante.
Pfizer y su socio alemán, BioNTech, están variando la receta de su vacuna. Están analizando con los reguladores estadounidenses y europeos un estudio para evaluar las dosis actualizadas a fin de enfrentar variantes como la detectada por primera vez en Sudáfrica.